Los hábitos de los consumidores han cambiado y los principales CMO están cambiando su enfoque de la gestión de la salud de la marca.
Los comportamientos y las expectativas de los consumidores están cambiando, creando nuevos retos para las marcas establecidas y oportunidades para las marcas emergentes.
Las marcas de éxito tienen que adaptar su gestión de la salud de la marca para ser más ágiles y con visión de futuro, permitiendo tomar decisiones rápidas e impactantes para seguir el ritmo de los consumidores y adelantarse a la competencia.